25 de Diciembre 2004
De chistes sin gracias y preguntas y miedos
Anoche cenamos en casa de mi hermana. Nos reunimos allí la familia de su marido y mis padres y yo. La cena fué muy bien. Luego, los cubatas, algún villancico y la hora de los chistes. Allí estaba un tío de mi cuñado y sus abuelos. He de reconocer que había chistes buenos pero claro, siempre llegan la tanda de chistes que hacen hervir mi sangre, y son de dos temas en concreto: chistes de temas machistas y de "maricones". No, no me reí con ninguno de ellos. Claro, después soy yo la seria. El colmo de los colmos fué cuando el abuelo de mi cuñado dijo: "el hombre que es apañado en su casa, que no necesita de una mujer es que es maricón". Mi padre me miró como diciendo: calláte por favor, tengamos la fiesta en paz. Y es que a los padres también hay que educarlos, y al menos, en mi presencia, él ya no cuenta ni chistes machistas ni de homosexuales, entre otras cosas, porque le he dicho que se ríe no de ellos sino de su hija, y que si me quiere no debe fomentarlos. Entiendo que el comentario provenía de un señor de más de 70 años, sí, de otra época... Pero hasta su nieto se callaba, es decir, eso me hace suponer que piensa igualmente. Joder, pero si estando estudiando fuera he tenido amigos y compañeros de piso que nada tenían que envidiar a alguna mujer con la que he compartido piso. ¿Eran ellos acaso maricones? Encima usando esa palabra que me parece tan despectiva.
Esta mañana, cuando me he despertado, me he quedado en la cama, rumiando si hice bien en callarme. Y ya se me ha venido otros pensamientos. Y es que se llevan muy bien las dos familias, y supongo que en las navidades venideras nos seguiremos reuniendo, pues hoy, los mismos de anoche hemos estado en mi casa comiendo. Y me ha asaltado un gran interrogante, y es, que si alguna vez tengo una pareja estable, querré que comparta alguno de estos días conmigo en familia. ¿Cómo será la situación entonces? No sé si mi pareja o yo nos sentiríamos violentas, no te digo de violearnos en medio de la cena o comida, pero sé que alguna muestra de cariño siempre hay, incluso una mirada cómplice, cogernos de la mano, o un beso, aunque viendo el "percá" sería casto y puro. Me duele mucho pensar en que si alguna vez llegara ese momento tuviera que elegir entre mi familia y mi pareja. O celebrarlas separadas para que no hubiera discordias, ni malas caras, ni incomodidades por parte de nadie. Y esto me ha entristecido.
Otra cosa que me ha sorprendido hoy es descubrirme mis miedos. Tengo miedo, y hacía tiempo que no tenía esta sensación, esos nudos en el estómago, esos nervios. Pero bueno, esto lo ampliaré cuando tenga más claras las ideas...
Viajé a itaca a las 25 de Diciembre 2004 a las 11:19 PMHace unos cuantos años, me imaginaba en casa de mis padres, en la mesa familiar. Mi padre, mi madre, mis hermanos, yo y mi pareja. Me imaginaba como sería aquella situación, y sinceramente me ponía de los nervios porque pensaba que ese momento nunca llegaría.
Y de echo no ha llegado, y dudo que llegue, al menos de esta forma.No porque yo no quiera, sino porque en mi familia han ido desapareciendo el número de platos encima de la mesa. Es más, ya no hay nisiquiera un plato por persona.
Mi padre no está en casa, mis hermanos son tan pequeños que aún no traen ni a sus novios/as, y como es lógico a sus suegros. Es más, este año no había mesas preparadas, ni platos, ni siquiera estaba yo...por problemas, en la mesa.
Con esto te quiero decir, que el día que tengas pareja estará a tu lado, cenando, con tu familia (e incluso algun sobrino), sin embargo dudo que yo pueda hacer eso algún día. Porque yo dudo que algún día pueda llegar a cenar en una mesa llena de platos, de sillas y de copas, como la de tu foto...
Pd: Yo con mi pareja lo celebraré a sólas. Una noche cualquiera, pues a su lado toda las noches serán buenas...
Mil besos Itaca
Pues nada, la Navidad que viene alquilamos una casita en la Alpujarra y nos vamos nosostras con nuestras parejas a celebrarlo, si no es la Navidad (creo que esas fechas no me dejan salir de casa, jajajaja) sí que me gustaría al menos noche vieja, con pijamas como traje de gala, con mucho cachondeo, como solemos hacer cuando nos reunimos, las botellas de lambrusquito y ron pálido para algunas, yo me encargo de cocinar, y tú de las fotos, alguna que otra de la música, y nada que ya tenemos montada la fiesta de fin de año. Ya sabes, no hagáis planes para el 31 de diciembre de 2005, que tenemos que pasarlo juntas, que este año que entra nos va a traer muchas cosas buenas, muchas sorpresas y suerte, ya verás, los años impares son los mejores, y éste, siento que va a ser la caña... Cuídate mucho, tengo muchas ganas de verte, a ver cuándo tiro para allá y nos vemos. Besazos y un abracito enorme...
Viajó a Ítaca: itaca at 27 de Diciembre 2004 a las 01:32 AMYo también le ando vueltas estos días a esos de con quién en un futuro pasaré las próximas navidades. Es un tema por desgracia muy extendido el de tener que elegir...a mí también me entristece.
Pero bueno, los pasitos se dan poco a poco.
Un besito. Me encanta leerte.
Viajó a Ítaca: Acuarelacool at 29 de Diciembre 2004 a las 05:23 PMNunca pensé que me atrevería a ir a la boda de mi hermano con mi ex... Allí, muchos de mis familiares se "enteraron" de que yo entendía, pero nadie dijo nada.
Viví una situación parecida a la tuya, en una comida más que familiar, con amigos de mis padres. Un niño se puso a chillar: "Marica! Marica! Marica!" al padre de mi cuñada, para hacer una "gracia".
Miradas violentas. Al final intervino su madre y le dijo que "No usara esa palabra como un insulto, porque no había nada malo en ser homosexual". Me alegré mucho, sobre todo porque esa mujer, era la única que no sabía nada de mí :-)
No sé quién alimenta ese tipo de ideas (los padres, en masculino), pero, pese a que no tenga pelos en la lengua, tengo muchísima paciencia, y no intervine.
No vale la pena, en realidad.
No todo el mundo tiene la misma conciencia.